Como este mes nos hemos quedado de nuevo en blanco, copio y pego aquí una observación, dividida en dos partes, de hace un par de años con el Newton 300 para así hacernos una idea de algunas cosas a las que podemos apuntar este mes en cuanto despeje.
Seguramente estarán en algún rincón del foro, pero las vuelvo a pegar:
LA NOCHE MÁS CORTA
Este pasado sábado día 20 pude por fin volver a las andadas y observar después de un impás de casi dos meses de mal tiempo cuando había Luna Nueva y de Luna Llena cuando hacía buen tiempo.
Uno a veces piensa si no sería mejor dedicarse a coleccionar sellos o cualquier afición de estas que no depende de tantos factores reunidos al mismo tiempo.
A lo largo de mi vida he intentado dejar la astronomía varias veces, pero no he podido. Antes o después la astronomía ha venido a buscarme de una forma u otra dándome momentos en los que no concibo dedicar mi tiempo libre a otra cosa que no sea la observación del Universo con mis propios ojos. Esto es la ASTRONOMÍA VISUAL.
El caso es que tocaba observar y me fui con los compañeros de A.V.A. cargado con el Dobson de 30cm. al CAAT. Las previsiones meteorológicas no estaban nada claras, estando el cielo completamente cubierto cuando yo salía de Valencia a eso de las 19:30h. Incluso llovió por el camino, pero hay veces que la meteorología es benevolente y las nubes fueron escampando poco a poco hasta dejar un cielo inmaculado.
En el plan tenía un mix de objetos que cubrían constelaciones como Virgo, Osa Mayor, Bootes o Draco.
Paso a relatar su búsqueda y captura.
Antes de empezar con la retahíla de objetos de la lista localizo unos objetos que con este diámetro son verdaderamente escandalosos, como M81 y 82 con sus otras dos compañeras, M13 ó M51, un verdadero escándalo.
Dejo aquí un dibujo que hice hace unos tres años de M51 con el Newton 250 pero cada día me veo menos capaz de dibujar los detalles que es capaz de enseñar el 300.
NGC 5634. Es un cúmulo globular que queda en la constelación de Virgo. De tamaño moderado, 5,5′ de arco de diámetro y un brillo de 9,5 mag., tiene casi tocándolo una estrella de mag. 8’5 que compite en brillo con el globular. Salvo alguna estrella brillante que hay por la periferia y que seguramente no pertenecerá al cúmulo, no me es posible resolver componentes en este objeto.
NGC 5746. Una galaxia edge-on, también en Virgo. Mag. 9,3. Dicen que mide 8,1′ X 1,4′.
Al ocular parece que no está perfectamente de canto sino que el halo central asoma más por un lado que por el otro. Es una perfecta desconocida en esta parte del cielo y, pese a tener poco brillo superficial, solo hace falta dejar reposar la imagen en el ojo unos instantes para empezar a ver detalles en su estructura, sobre todo en el centro.
Cerca de aquí, también en Virgo, se encuentra la modesta galaxia elíptica NGC 5846. Tiene magnitud 10 y unas dimensiones de 3′ X 3′ pero no muestra ningún detalle interno. Con el ocular Nagler 22 no es más que una estrella borrosa que al cambiar a más aumentos revela su naturaleza. Tocando la galaxia, inmersa en los dominios de ésta hay una segunda galaxia, 5846A, muy pequeña y de la que no soy capaz más que ver su aspecto estelar. La observación de NGC 5846 la dejé ahí, para pasar al siguiente objeto. Una lástima porque luego, mirando mapas de la zona, resulta que veo que hay otra galaxia muy cerca, casi en el mismo campo, NGC 5850, espiral barrada de cara que podría haber enmarcado dentro del mismo campo del ocular obteniendo una imagen fantástica. Otro día será.
NGC 5897. Cúmulo globular esta vez en Libra con una mag. De mag. 8,4 y un diámetro de 11′ de diámetro a unos 5 grados a NNE de la estrella σ Librae.
Es uno de los globulares menos concentrados que se conocen y eso se nota al telescopio haciéndole a uno dudar si es en realidad un cúmulo abierto de los densos, como M11 p. ej.. Las estrellas que lo componen van de la mag. 11’5 en adelante.
Nos vamos a la Osa para ver una galaxia elíptica. NGC 5322. Tiene unas dimensiones modestas, 6′ X 4′ y una mag. De 10,5 mag., el brillo superficial es elevado y es fácil de localizar. Junto al núcleo aparece una estrella superpuesta. Un halo difuso rodea la región central, como es habitual en las galaxias elípticas.
En los alrededores de la galaxia M101 nos encontramos con la más cercana de sus compañeras: NGC 5474. Catalogada como galaxia peculiar enana parece ser que la cercanía con la galaxia grande la ha deformado y tenemos que el núcleo no está en el centro sino en la periferia. En fotografías aparecen evidencias de estructura espiral, pero con la peculiaridad de que el núcleo está en un borde en lugar de en el centro. Los aumentos no ayudan mucho y se necesitaría un cielo negrísimo para ganar contraste y ver algo más de estructura. Mag.10,8 y dimensiones 6′ X 4,9′.
Otra de las compañeras de M101 es NGC 5743 otra galaxia sin detalles al ocular que mide solo 2,2′ X 1,7′ con un brillo de 11,5 mag. Es fácil pasar de largo si se está buscando por la zona con un ocular de poco aumento debido a la puntualidad del objeto. Aplicando algo más de 100 X se percibe una figura elíptica y un núcleo brillante. Una estrella de mag. 14 cae al lado del núcleo.
Sin movernos demasiado nos vamos a por una tercera galaxia de la corte de M101: NGC 5631. Galaxia en la que hay que tener fe para admitir que es espiral, como todas las de estas dimensiones aparentes. Brilla con mag. 11,5 y mide 1,8′ de diámetro. Su aspecto a bajos aumentos es más estelar si cabe que la anterior. Será debido a sus reducidas dimensiones, el brillo superficial es elevado. Con ciento y pico aumentos el núcleo es muy brillante, casi cegando la periferia.
NGC 5676 en Bootes. Galaxia espiral de mag. 11,2. Mide 3,7′ X 1,6′ y tiene un aspecto asimétrico teniendo los brazos del sur bastante más extensión que al otro lado.
A 2,5 grados a SSE de la estrella θ Bootis, es un objeto débil al ocular en el que el núcleo apenas resalta en brillo sobre la periferia. Para ver algo más que un borrón alargado es necesario utilizar más de 100 X.
Muy cerca, de esta última nos encontramos con otra débil miniatura: NGC 5689. Galaxia espiral de mag. 11,9 y dimensiones 3,7′ X 1′ con núcleo estelar. Con visión lateral se nota su orientación Este – Oeste.
Esta vez le toca a un cúmulo globular en Bootes. Se llama NGC 5466 brilla con mag. 9,2 y su diámetro es de 9′, bastante extenso pues. No tiene una condensación central especialmente brillante, dándole tiempo se puede percibir alguna irregularidad en sus bordes, y se puede resolver en estrellas, eso sí de mag. 14 en adelante. En esta impresionante imagen del Hubble se pueden ver galaxias lejanas ¡a su través!
Para acabar con esta constelación visitamos la galaxia elíptica de mag. 11, NGC 5557 que mide apenas 2,2′ X 2′. Otra vez es inevitable subir aumentos para ver algo más, como la orientación NE-SW. Una estrellita acompaña al centro galáctico justo al SE.
Hubo más, pero lo dejo para la siguiente entrada.
Saludos.
Néstor.
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Continúo enumerando los objetos que observé la noche del 20 al 21 de junio de 2009 en el Centro Astronómico del Alto Turia.
Cuatro de la mañana. Después de tomar un tentempié mientras daba una vuelta para ver a la gente que todavía quedaba por ahí con sus telescopios he apuntado el telescopio hacia la constelación de Draco.
El objeto cazado ha sido NGC 5982, una galaxia elíptica de mag. 11’1 y que mide apenas 3,0′ X 2,2′ cerca de la estrella de 3ª magnitud Iota (ι) draconis. Débil y pequeña, uno debe saber exactamente su localización para no confundirla con una estrella pero, como esta noche he visto unas cuantas como esta, uno le va pillando el truco a encontrar objetos escurridizos. Cerca tiene un par de galaxias vecinas, algo más débiles, que se encuentran en línea ofreciendo una imagen bastante espectacular pero que no aparecen en mi plan de observación, por lo que no me entretengo demasiado.
También en Draco encontramos NGC 5907, una galaxia de canto moderadamente larga pero muy fina de mag. 10’3 a la que llaman galaxia de la astilla. Es como una ralla en el cielo y me parece bastante llamativa. Buscándola se ven un par de galaxias que tampoco estaban en el plan y que son NGC 5905 y 5908.
Cerca de aquí se encuentra NGC 5866. Es una galaxia lenticular con bastante brillo superficial y dimensiones contenidas. Mide 7,3 X 3,5′ y brilla con magnitud 9’8. Los 68 aumentos que da el nagler 22 son suficientes para detectarla sin problemas, detectando su orientación NO – SE. Tiene un núcleo bastante condensado y su figura está muy bien recortada.
Ahora toca la nebulosa del Ojo del Gato, NGC 6543, pero como es un objeto al que hay que poner muchos aumentos para poder disfrutarlo y la noche no permite abusar de los mismos no ofrece una imagen digna de recordar. La intentaré en noches sucesivas.
¡Horror, Venus aparece por encima del horizonte! Eso quiere decir que en breves momentos el cielo empezará a perder su oscuridad porque detrás viene el Sol. Parece que ha sido hace un rato que he empezado a observar y ahora ya se acaba la noche.
Sin perder un segundo agarro el telescopio por las riendas y lo llevo hacia la Nebulosa del Velo, ese remanente de supernova de hace 5.000 ó 8.000 años que hay en el Cisne. Como siempre, la parte más fácil de localizar es la que empieza rodeando la estrella 52 Cygni. Una vez centrada la estrella, sin haber puesto todavía ningún filtro nebular resulta evidente el trozo de nebulosa que rodea la estrella y que se deja caer serpenteando hacia abajo. Es la parte llamada “Escoba de Bruja” o también NGC 6960.
Como es una nebulosa bastante grande utilizo el nagler 22 con sus 1’2 grados de campo real. Por supuesto utilizo filtro nebular para que el objeto resalte lo máximo posible. Después de probar con un filtro UHC dejo puesto un OIII que me parece que contrasta más la imagen. Me dedico a recorrerla de abajo hacia arriba, pasando otra vez por 52 Cygni y llegando a la parte en donde se va disolviendo y creando una serie de encajes entrelazados que es mejor observar con algo más de aumento para mejorar el contraste.
Aunque con origen en la misma supernova, la nebulosa (que abarca unos tres grados) está dividida en varios objetos con diferente entrada en el catálogo NGC. Son en total cuatro entradas, NGC 6960, 6979, 6992 y 6995, aunque a vista de telescopio se pueden apreciar dos cuerpos diferenciados, la parte Oeste que acabamos de ver y la parte Este, a la que ahora me dirijo. Es menos concentrada, más sutil y menos extensa, de hecho es mucho más difícil detectarla sin filtro, pero la cantidad de detalles a apreciar con filtro es mayor. Dejo aquí una imagen de esta parte del Velo:
Con prisas desciendo hacia la parte central de la constelación del Cisne para intentar ve la Nebulosa Creciente, NGC 6888, una nebulosa planetaria que también es invisible sin filtros nebulares. Pero… ya es demasiado tarde el fondo del cielo es ya demasiado brillante y me tengo que resignar a concluir la observación.
Este es un dibujo de la Nebulosa Creciente de hace un tiempo:
Me ha sabido a poco. A las once de la noche todavía no había oscurecido del todo y ahora, apenas las cinco de la mañana el Sol volvía a amenazar con aparecer en breves momentos.
Claro, es la noche del 21 al 22 de junio, la noche más corta del año.
La más corta en todos los sentidos.
Hasta la próxima.
Néstor.